Causas del Bullying

Familia: Durante los primeros años se forma la personalidad del niño  y es dentro de  la familia  donde se va dando esta formación  y donde  se aprenden las maneras de reaccionar hacia los demás, son modelos de comportamiento que se tienden a imitar. Si en la familia existe este tipo de violencia, tanto física, verbal o  psicológica, el niño aprende como debe comportarse con los demás y  cuando ha sido una víctima, lo más probable es que se vuelva   un agresor pues es la único comportamiento que conoce, no tiene más modelos.
Escuela: A veces hay algunos compañeros escolares que tienen menos recursos para defenderse de los “grupitos” que se forman y es ahí donde empieza el problema.  En otras ocasiones las maestras “clasifican” a los niños: los que si aprovechan, quienes se llevaran todos los elogios y los “distraídos o flojos” quienes se llevan las críticas y los rechazos, y por consiguiente son mas ignorados, no les permite participar en las situaciones comunes o favorecedoras y se sienten discriminados. A veces como padres no le creemos al hijo que se saco una mala calificación, cuando nos dice: “es que le caigo mal al maestro, ya me trae de encargo”.
Trabajo: Puede haber muchas situaciones, pero la más común es tratar de anular a un compañero o subordinado que según el agresor, pueda “quitarle la chamba”, ya sea porque el agresor es flojo o tenga menor preparación.
Medios de comunicación:  A veces cuando no se tiene una buena autoestima,  se “adopta” de la televisión la idea que el fuerte es el que agrade a los demás,  y desgraciadamente en muchos programas el agresor es el alto el fuerte y el bien parecido, modelo ideal que pueden tomar algunos niños que no han sido bien valorados.
Los Testigos: Desgraciadamente la gente que está alrededor se vuelven testigos mudos, que no hacen nada y por lo mismo permiten que sucedan las agresiones.   Se vuelven cómplices estar ahí y no hacer nada es aprobar la agresividad.